top of page
Buscar

Naprotecnología

  • Foto del escritor: Luciana Inés Mazzei
    Luciana Inés Mazzei
  • 17 abr 2020
  • 3 Min. de lectura


Una nueva ciencia reproductiva que está revolucionando el mundo de la fertilidad. Se basa en el diagnóstico y tratamiento de las causas de infertilidad, tanto del hombre como de la mujer, mediante el estudio y el seguimiento del ciclo de la fertilidad del matrimonio. La Naprotecnología te ayuda a descubrir cómo quedar embarazada, monitoriza y mantiene la salud reproductiva y ginecológica de la mujer, además de proveer tratamientos médicos y quirúrgicos que ayudan al sistema procreativo. Una verdadera alternativa a la reproducción asistida.

A través de El método Creighton monitoriza, analiza, detecta y diagnostica con precisión las alteraciones que se producen en el ciclo de la ovulación y poder tratarlas eficazmente.


La familia es una comunidad de personas, ligados por lazos afectivos y de sangre, donde un hombre y una mujer, unidos en matrimonio, engendran hijos y los guían para llegar a su plenitud de personas mediante la educación y la sociabilización.

En ella cada uno es amado y aceptado por ser quien es. El hombre, como ser social, necesita ser con otros para desarrollarse plenamente. La persona no vive de instintos sino de aprendizajes (Domínguez, 1995), que solamente pueden ser plenos y duraderos si se reciben dentro de la familia.

Se presentan a diario situaciones donde los vínculos familiares si no están rotos están seriamente lastimados, cuesta el diálogo, la escucha abierta y generosa para comprender al otro, la educación en valores y en la libertad para formar personas fuertes y sanas, que sean pilares de la sociedad en la que viven.

En este panorama social y familiar es donde se hace necesaria la intervención de profesionales y personas dispuestas a ayudar y acompañar a otros a encontrar caminos para el diálogo, la comunicación y la contención de todos los miembros de la familia. Profesionales que conozcan el alma humana y tengan técnicas adecuadas para aplicar en cada caso.

La Orientación Familiar es una profesión que, gracias a su especificidad y novedosos abordajes, previene y atiende las problemáticas que se dan en las relaciones intrafamiliares.

Su objetivo es orientar y empoderar a las familias para prevenir y resolver situaciones de crisis y conflictos.

Aborda las problemáticas familiares con mirada sistémica y foco en las fortalezas, potencia las relaciones intrafamiliares, ayudando a las familias a descubrir sus propios recursos

Tiene una mirada interdisciplinar ya que comparte intereses y utiliza aportes de diferentes disciplinas como la antropología, para la construcción de su propio campo disciplinar. Toma la Teoría General de los Sistemas como marco y suma elementos de distintos modelos teóricos de intervención.

Usa una metodología propia: herramientas inherentes a la Orientación Familiar para el diagnóstico y el abordaje de los casos.

Con relación a la Naprotecnología ayudamos a la pareja a resolver conflictos que pueden surgir de la frustración que provoca la dificultad para lograr el embarazo deseado, o los tiempos de espera que a veces se hacen muy largos y la ansiedad lleva a estados de estrés que es necesario manejar.

Además, debido a que mediante la Naprotecología se puede llegar a un diagnóstico que muchas veces puede provocar dolor a la pareja o a uno de sus miembros, desde la Orientación los acompañamos a aceptar el diagnóstico y a buscar caminos alternativos para resolver la situación.

Por ser la Napro una técnica que realiza un abordaje integral de la salud de la mujer, es importante que este abordaje integre todas las dimensiones de la persona: física, psíquica y espiritual, por ello, la Antropología personalista que toma la Orientación Familiar como fundamento de estudio es la indicada para acompañar los procesos para recuperar la fertilidad.

La Naprotecnología ayuda desde la ciencia para que la pareja tenga un conocimiento profundo de su biología y de los ciclos de la mujer. La Orientación Familiar abre caminos para que la pareja, desde la teoría de los sistemas, encuentre sus propias fortalezas, recursos y un conocimiento pleno de la propia sexualidad.

La elección de los ritmos naturales comporta la aceptación del tiempo de la persona, es decir de la mujer, y con esto la aceptación también del diálogo, del respeto recíproco, de la responsabilidad común, del dominio de sí mismo. Aceptar el tiempo y el diálogo significa reconocer el carácter espiritual y a la vez corporal de la comunión conyugal, como también vivir el amor personal en su exigencia de fidelidad. En este contexto la pareja experimenta que la comunión conyugal es enriquecida por aquellos valores de ternura y afectividad, que constituyen el alma profunda de la sexualidad humana, incluso en su dimensión física. De este modo la sexualidad es respetada y promovida en su dimensión verdadera y plenamente humana, no usada en cambio como un objeto” (Familiaris Consortio Nº32).

 
 
 

Comments


Únete a nuestra lista de correos para recibir las novedades

¡Gracias por tu mensaje!

Blog de Orientación Familiar

Artículos de divulgación

Urquiza 504

2300 Rafaela

Argentina

bottom of page